domingo, 6 de enero de 2008

principios de la dualidad estereofónica

estoy pensando en mujeres desnudas, estereotipos y en sonidos... más que todo porque quisiera ser menos superficial... igual que uno no puede hacer nada contra los saltitos de algunas gentes...

da lo mismo pensarlo así: soy una canción con sonido estereofónico, entonces habrán quienes compartan un audífono porque van en el bus escuchándome de un mismo lugar (ipods, ypods, ipuds, etc) y quién tenga la salida derecha del audífono se pierde mi salida izquierda y consecutivas viceversas, solamente porque fui hecho en estéreo y nadie pensó en que iba a ser compartido en algún momento desde un mismo lugar...

tengo algo químicamente bueno, como parto incontingente del consumismo de esta navidad... la incontingencia existe: es la contradicción de una contingencia algebraica... jamás debe confundirse con incontinencia o términos profesionales, y puede usarse hasta para ofender... vete a la contingencia, muérdame la contingencia, etc...

alquilé películas, salí a correr, hice cajetas de zanahoria, hice flexiones, me despedí de una amiga, me dio pereza hacer abdominales, me masturbé dos veces, me pichasearon en smash brothers, no me dio la gana contestar el teléfono, me lesioné el ego, busqué mi pasaporte, leí blogs, no encontré mi pasaporte, comí pastas de espinacas y otra sarta de barbaridades sin entender que es claudicar o ignorar la posibilidad de irme a Argentina lo que queda del año...

esto que, si me pongo a promoverme discusiones descubro que soy un monstruo, y bien podría ser el villano de alguna película, con novia descerebrada y todo... igual no le tengo miedo a James Bond, nada más tengo que matarlo a la mitad de la película cuando lo tengo capturado y antes de que se escape porque mi novia descerebrada se vuelve humanista y decide temerle a mis planes de conquistar el mundo... aunque la película sea corta...

[meleobro...]