
cierto jueves viajé junto a una pelirroja bastante amargada, poco fue necesario y ella empezó a escupir sus ascos...
fue interesante porque resultó tener un palpitar sexual espasmódico, como el de un estornudo o una tos rara... estas cosas pasan muy poco y siempre me transforman en un antihistamínico o en jarabe para la tos...
lo segundo que pensé, fue en ambos lamiéndonos todo como si el resto de personas que quedan fueran maniquíes...