soy un monstruo, y traigo tres breves introducciones a tres historias de mi terrrible agonía...la primera inició en la búsqueda de mi libertad, transformando mi cuerpo en un saco sin bondades para nadie, me molí a palos para poder entrar por cualquier grieta en cualquier lugar... entonces agonizo...
¿porqué? pues si, claro, soy un monstruo y les juro que siento que el universo tiene una deuda enorme conmigo, por ella, por los intentos de quebrar el espacio y el tiempo solamente para retirarle un olor a manzana de las encías...
me encanta que la locura como la siento sea tan escaza... pero detesto que la muerte se aleje tan rápido de mi como efecto secundario...
la segunda historia decidí lanzarla sobre todo aquel que no interprete mi lejanía, y es que no quiero aclarar mis motivos o megalomanías...
pero me animo a arruinarles una sorpresa: ya han sido mencionados 2 personajes diferentes y ninguno soy yo...
¿y sobre sexo? tercera historia~ hablemos de sexo...
¿misionero? uhmm, no.
¿por detrás..? uhm... no.
¿entonces?
el sexo que quiero ya no funciona en un plano geométrico, las posiciones, kamasutras, las variedades de todas las formas o las diferentes perspectivas de una forma, pues no... el sexo que busco tiene que ser diferente...
ejemplo: amas a esta nena, tienes un amigo, la nena que amas tiene sexo con tu amigo, sientes celos, tu amigo siente que te traicionó, la nena siente que te traicionó, la nena te ama, el amigo no quiere dejar de ser tu amigo... entonces hipotéticamente: vos, en lugar de sentir enojo sientes excitación, una excitación sexual formada de la traición del amigo y la traición junto al porqué de la nena que amas...
posiblemente sea una situación imposible de simular... pero podría formar una química confusa, novedosa, terrible, absurda...
