martes, 7 de agosto de 2007

percoladores gigantes

soy malo con los ojos, mi visión es sana pero siempre he preferido los olores y sonidos... cerrar mis ojos desarma el ambiente en pedazos rítmicos... y los olores despiertan recuerdos o marcan momentos...

las imágenes en mi mente siempre tienen niebla... y a duros intentos de corregir este dilema espiritual he logrado subirme un poco el brillo...

y estoy harto... opciones y solo opciones entre tendencias y confusiones artísticas... sin campo para inventar más opciones o el universo te muerde con las muelas derechas... y si uno no tiene pelotas de mimbre sería incómodo... un mordisco universal en medio de tu existencia es una cagada...

libros y ciencia con poder degenerativo a la capacidad de crear de los seres humanos... las tendencias domestican poetas, corazones, música, olores, sexo, espíritus, blogs, masturbaciones, amigos y si tuviera perro, pues a mi perro...

en cada esquina se repite lo mismo...

quisiera que todos gritáramos sin ser percolados antes... quiero libertad para crear opciones... no solo para mover piezas o pintar lo que ya existe...

me siento percolado... o más bien en una licuadora gigante con un montón de desconocidos que creen que tienen la razón, y todos estamos equivocados... nada es nuestro...